Entrevista a Juan Ignacio Sánchez Lara
En esta ocasión, a través de nuestra entrevista, vamos a conocer a Juan Ignacio Sánchez Lara.
Como muchos de nosotros se recuerda siempre pegado a un ordenador, durante años fue un usuario compulsivo de software de diseño, 3D, fotografía… En el instituto aprendió a programar y.. ¡se abrió un mundo nuevo para él! La informática, un mundo que le apasiona y del que “no se quiere separar”.
Le gusta desarrollar software y valora especialmente formar parte de un equipo motivado que se exige en su trabajo y que disfruta con lo que hace, es una experiencia única.
Para él, la lucha contra las inercias (las propias y las ajenas) es todo un reto, es complicado abrirse a cambios, y mucho más adquirir el hábito de cuestionarse todo uno mismo: “Creo que hay pocas cosas que aporten tanto valor como una cultura que favorezca el cambio… nada como una organización que confíe en tu trabajo y un equipo que te respalde”. Quedarse parado supone una pérdida de oportunidades que no nos podemos permitir.
Además del Colegio, es colaborador activo en otros grupos y organizaciones que nos recomienda, es entusiasta de las metodologías ágiles, y sobre todo, disfruta trabajando codo con codo con gente que desafía tus límites.
En esta ocasión, a través de nuestra entrevista, vamos a conocer a Juan Ignacio Sánchez Lara.
Como muchos de nosotros se recuerda siempre pegado a un ordenador, durante años fue un usuario compulsivo de software de diseño, 3D, fotografía… En el instituto aprendió a programar y.. ¡se abrió un mundo nuevo para él! La informática, un mundo que le apasiona y del que “no se quiere separar”.
Le gusta desarrollar software y valora especialmente formar parte de un equipo motivado que se exige en su trabajo y que disfruta con lo que hace, es una experiencia única.
Para él, la lucha contra las inercias (las propias y las ajenas) es todo un reto, es complicado abrirse a cambios, y mucho más adquirir el hábito de cuestionarse todo uno mismo: “Creo que hay pocas cosas que aporten tanto valor como una cultura que favorezca el cambio… nada como una organización que confíe en tu trabajo y un equipo que te respalde”. Quedarse parado supone una pérdida de oportunidades que no nos podemos permitir.
Además del Colegio, es colaborador activo en otros grupos y organizaciones que nos recomienda, es entusiasta de las metodologías ágiles, y sobre todo, disfruta trabajando codo con codo con gente que desafía tus límites.
Cuéntanos un poco tu trayectoria tanto en tu trabajo como en el colegio
La vocación como informático me llegó pronto. Desde que me regalaron un 8086 me recuerdo junto a un ordenador. Durante años fui un usuario compulsivo de software de diseño, 3D, fotografía, etc., hasta que en en el instituto aprendí a programar y se abrió un mundo nuevo del que no me quiero separar. Me gradué en la UVa como Ingeniero Técnico Informático de Sistemas en 2004 y como Superior en 2006, y lo complementé con todas las becas y cursos en las que me fue físicamente posible participar.
En los últimos años he trabajado sobre todo con aplicaciones web, pero también he hecho mis pinitos en desarrollo sobre iOS, la gestión de equipos y otro buen puñado de cosas. ¡Hay un número infinito posibilidades!
En qué consiste tu trabajo
Recientemente me he incorporado a la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León como Analista de Sistemas. Estoy trasladando a este puesto lo aprendido en mi carrera, orientada al desarrollo de aplicaciones de gestión sobre JEE. Estoy aplicando mucho de los años anteriores, en los que formé parte de un gran equipo organizado mediante metodologías ágiles. Formé parte activa de esa transición, y ha sido una de mis mejores experiencias profesionales. Aunque, por ejemplo, entiendo la justficación de la documentación tradicional, intento potenciar la comunicación con el equipo y los artefactos ejecutables. La lectura de libros como Scrum from the Trenches, Clean Code, TDD: by Example o Management 3.0 y, sobre todo, trabajar codo con codo con gente que desafía tus límites ha supuesto un giro radical a mi concepción de la profesión.
Qué te gusta más de tu trabajo
Me encanta mi profesión, me encanta desarrollar software y creo que vivimos un momento fabuloso para desempeñarlo. Uno de los momentos que más disfruto es cuando algo en lo que te estás esforzando comienza a ser explotado sus usuarios y puedes observar en funcionamiento el valor del trabajo del equipo. Y desarrollar junto con otra gente tan apasionada como tú: formar parte de un equipo motivado, que se exige en su trabajo y que disfruta con lo que hace es una experiencia única, porque constantemente estás aprendiendo, mejorando y consiguiendo mejores resultados.
Qué retos encuentras en tu trabajo
Aunque en el día a día los retos son constantes, sin duda lo más difícil de esta profesión es la lucha contra las inercias (¡tanto ajenas como, sobre todo, propias, por supuesto!). Cuando llevas años haciendo algo de una forma, es complicado abrirse a cambios que te plantean, y mucho más adquirir el hábito de cuestionarse todo uno mismo. Lo he vivido en la implantación de metodologías ágiles, en los cambios de hábito a la hora de utilizar frameworks, en el trato personal… ¡Y ahora, que estoy aprendiendo programación funcional, veo que el cálculo lambda queda muy lejos en la carrera y la programación estructurada ha hecho mella en mis hábitos mentales! En un sector todavía en pañales y en constante cambio, quedarse parado supone una pérdida de oportunidades que no nos podemos permitir.
Qué has encontrado que haga tu trabajo más fácil
Como consecuencia de la inercia, creo que hay pocas cosas que aporten tanto valor como una cultura que favorezca el cambio. Y en eso cobra vital importancia el apoyo que te proporcione tu entorno. Una organización que no fije exactamente lo que debes hacer, sino que delimite las restricciones y otorgue libertad al equipo para desarrollar su trabajo no tiene precio, y no es fácil. Cambiar el ordeno y mando (que en el fondo es cómodo para todos) por ser facilitador exige mucho tanto del encargado de habilitar el trabajo del equipo como del equipo, del que se dispara su responsabilidad e implicación. En resumen, nada como una organización que confíe en tu trabajo y un equipo que te respalde.
En la misma línea, fuera del trabajo pero dentro de la profesión, los grupos y organizaciones están desempeñando un papel fundamental. La labor del Colegio es conocida por todos los lectores del boletín, pero en España hay una intensa actividad en la que participar. Por ejemplo, este mismo mes tenemos el Codemotion en Madrid, y de Agile-Spain la CAS 2013 en Bilbao. Y para quien viva en Valladolid y no pueda desplazarse, aquí mismo vamos a tener unos meses con muchísimas actividades y charlas organizadas por AgileCyL (@agilecyl) y Cylicon Valley (@cylicon_valley). Por ejemplo, se están cocinando unas jornadas sobre testing en noviembre en las que espero participar, pero cualquiera va a encontrar charlas y talleres de interés. Hace unos días hubo una sobre servidores de mapas en alta disponibilidad, y los sábados suele haber katas con ejercicios de programación.
Cualquiera que quiera contactar conmigo (¡siempre estoy disponible para proyectos interesantes!) puede hacerlo en Twitter (@juanignaciosl), LinkedIn o mi página. Y si te gusta la fotografía, pásate por mi Flickr.