El hecho de que la Ingeniería en Informática no tenga atribuciones lleva a situaciones ridículas que provocan injusticias entre nuestros compañeros y un mal ejercicio de la que debería de ser nuestra profesión.

Se dan muchos casos en que la falta de atribuciones provoca que no estemos en igualdad con otras ingenierías. Recientemente nos ha llegado el caso de un compañero que refleja esta situación:

Nuestro compañero es el responsable del departamento de informática de una fábrica, pero la parte de software de automatización de los proyectos la dirige otro tipo de ingeniero, el cual no atiende a las recomendaciones del departamento de informática. Ante la solicitud de nuestro compañero de dirigir la parte de software, se enfrenta con una oposición alegando que los Ingenieros en Informática no tenemos atribuciones profesionales para ello.

No tenemos atribuciones profesionales. Esto el resto de ingenieros lo saben y tratan de aprovecharse, intentando arrastrar los proyectos a sus áreas de actuación. Nosotros seguiremos dando guerra para declarar estas injusticias.